No daré mi nombre esta vez, no por desconfianza sino por costumbre...
Probablemente mi nivel cultural no llegue aún al de mis contertulios en este espacio, y no me avergüenzo de decirlo porque se que voy por buen camino.
Algunos pensarán que debería introducir algún dato en especial sobre ciencia, sociedad o política, o que mi entrada debería ser mas didáctica y enfocada desde otro punto de vista, seguramente tengan razón pero ahora mismo no tengo ganas para molestarme en discernir a cerca de temas tan complejos.
No voy a hablar de mí, aunque siempre acabo haciéndolo, irremediablemente, no por egocentrismo o por maldad, simplemente por costumbre, resulta innato, un mal hábito.
Voy a hablar como bien reza el título de las máscaras
Hay muchos tipos de máscaras en este mundo, algunas se utilizan como objeto de ocio; pero las más importantes son las que utilizamos para evitar que nos vean en todo nuestro esplendor.
No obstante, estoy seguro de que más gente aparte de mí las ha utilizado alguna vez, espero que nadie de una forma tan enfermiza.
Un buen día, un conocido mío me tildó cobarde, y puede que estuviese en lo cierto, pero yo no le temo a la vida, no se trata de eso...
Cada cual ha vivido una existencia particular, y de esa experiencia ha sacado sus lecturas, que de una forma involuntaria aplica a su forma de vida, las máscaras son la mía. Puede que algunos no entendais a lo que me refiero, es sencillo, lo resumiré con una frase...
No se quién soy; lo que de verdad temo no es a vivir una vida, es a retirar todas aquellas caretas con las que he ido cubriendo mi rostro y darme cuenta de que en el fondo, al final del baúl, ya no queda nada.
Que mi vida fue una mentira y sólo utilice al mundo, y no solo eso, me utilice a mi mismo
Como siempre, acabo hablando de mí
Un saludo de una mente poco inspirada
6 comentarios:
El tema de las "máscaras" del hombre siempre ha sido muy recurrente. Todos acabamos utilizandolas en alguna u otra ocasión. Luego los hay que viven se muestran permanentemente enmascarados.
A mí, siempre me ha recordado a las "gafas de sol" por su carácter de ocultadores de las facciones, del rostro, del alma. ¿El rostro es el espejo del alma?
No te preocupes por la máscara, si te das cuenta de que la llevas puesta pronto te la quitarás.
La máscara implica ocultación y es una excusa para mostrarte tal como quieres que te vean los demás. Con el tiempo eso deja de importarte.
Yo no me quito la mascara y ya esta
simplemente la cambio y me pongo otra
ahi radica el problema
no hay uno unico y verdadero
quizas no exista
el bello juego de las máscaras, armoniosos cambiando de pareja como en un baile veneciano.
Muy bueno. De poco inspirado, nada.
Aquí no llevas ninguna máscara, sólo ocultas tu nombre pero eso es otra cosa. Te la has quitado.
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