jueves, 25 de octubre de 2007

Atletas: grandes héroes I - Emil Zátopek, La locomotora humana

Emil Zátopek,
nacido el 19 de Septiembre de 1922 en Kopřivnice (Checoslovaquia);
fallecido el 22 de Noviembre de 2000 en Praga.


Su vida y logros

Pocos atletas lo son por vocación, y Zátopek no fue uno de ellos. Muchos son descubiertos por un cazatalentos o un entrenador y otros entran en el deporte por pura casualidad, sin quererlo e incluso a veces repudiándolo. Zátopek sí fue uno de estos últimos.

Cuentan que a principios de los 40 Emil frecuentaba la Escuela para jóvenes ejecutivos del empresario Tomás Bata, ubicada en la ciudad morava de Zlín. Parece ser que allí, el ejercicio físico y el deporte eran uno de los pilares básicos de la educación de los jóvenes.

Un día Zátopek debía disputar junto con los demás alumnos del curso una carrera por las calles de Zlín. El joven no tenía ganas de correr,y para excusar su momentánea pereza, alegó que padecía dolores en una de las rodillas. El médico de turno se dio cuenta de que Zátopek había inventado el pretexto y éste tuvo que disputar la prueba. "Llegué a la meta en segundo lugar, la gente me aplaudió y eso me gustó. Desde entonces empecé a acudir a las sesiones de entrenamiento", recuerda el atleta, ahora de 76 años de edad.

En 1945 decide ingresar en el ejército checoslovaco, con la intención de hacer carrera militar. En estos años acumuló 8 campeonatos nacionales entre los 5.000 y los 10.000 metros. Pero su nombre y su peculiar estilo de correr le empezarían a hacer mundialmente famoso a partir de las Olimpíadas de Londres de 1948, en donde cosechó su primer oro, en la disciplina de los 10.000. Seguiría dos años más tarde en los Campeonatos de Europa de Bruselas agrandando su nombre al hacerse con las pruebas de 5.000 y 10.000 metros.

Pero su nombre quedaría inmortalizado en los anales del atletismo, del deporte y de la historia en el año 1952, en Helsinki. Al realizar una hazaña épica nunca antes vista al ganar las tres pruebas de fondo olímpicas: 5.000, 10.000 metros y la maratón en apenas una semana.

Aquella carrera de 5.000 metros en Helsinki será recordada por muchos como una de las mejores de la historia.



Aquí la última vuelta de aquellos 5.000 para la historia.
Posteriormente participó en el Campeonato de Europa de1954 (que tuvo lugar en la ciudad Berna, donde logró de nuevo el título continental de 10.000 m, así como la medalla de bronce en 5000 m) y en los Juegos Olímpicos de Melbourne 1956 fue sexto en el maratón. En 1958, en el Cross Internacional de Lasarte, puso fin a su trayectoria deportiva. A lo largo de ésta compitió en 334 carreras y obtuvo 261 victorias, y estableció un total de 18 plusmarcas mundiales en distintas distancias.

Llegó a ser un héroe nacional en Checoslovaquia y ascendido al rango de coronel, pero su participación en 1968 en el movimiento de la Primavera de Praga le costó la expulsión del Partido comunista y del Ejército. Empezaron años de trabajar para subsistir-dicen que incluso llegó a trabajar barriendo las calles- hasta que en el año 1975 su figura fue rehabilitada por el régimen y sus honores le fueron restablecidos.


Su estilo

Emil Zatopek era un hombre flacucho con un aspecto aparentemente enclenque de 1,74 de estatura y 67 kilogramos de peso. Cuando corría daba la sensación de que se podía derrumbar en cualquier momento y que no le quedaba aire para respirar.Su estilo era poco común. Su cabeza era sacudida de lado a lado para soportar el envión que daba con sus brazos y su cara se contorsionaba brutalmente, como si estuviera sufriendo el dolor más severo.
Smith Red, el columnista famoso que cubrió los Juegos de Helsinki, escribió: “ese Zatopek corrió como con un péndulo sobre su pescuezo, su lengua carmesí pendía fuera, como si realmente lo estuvieran estrangulando".


Era un espectáculo admirar su valor, su aplomo, su consistencia a pesar de parecer desfallecido. Para convertirse en aquella locomotora, en un atleta con temple de acero, Emil Zátopek entrenaba todos los días la carrera de los diez mil metros, dividida en etapas. Primero realizaba cinco carreras de 200 metros, luego veinte recorridos de 400 metros, y finalmente otras cinco carreras de 200 metros. El atleta solía también alternar carreras veloces de 100 o 200 metros con trotes en la misma distancia.







Maratón de las Olimpiadas de Helsinki 1952.

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